En estas fechas lo normal es felicitar la navidad que, en definitiva, es celebrar el nacimiento de Jesucristo. Sin embargo, como comentábamos en este enlace Jesús no nació ni por asomo el 25 de diciembre. La fecha fue escogida por la iglesia para apropiarse de una fiesta pagana pre-existente y para que el pueblo no notara demasiado cambio con la llegada del cristianismo.
Sin embargo, últimamente, por parte de la comunidad científica y no religiosa se está instaurando el hecho de celebrar el cumpleaños de Sir Isaac Newton, probablemente uno de los mayores científicos de la historia de la humanidad.
Isaac Newton nació el día de Navidad de 1642 como un niño prematuro del que incluso se llegó a pensar que no sobreviviría. La fecha tiene una peculiaridad ya que, si bien nació el 25 de Navidad en Inglaterra, en el resto del mundo católico era el 4 de enero de 1643.
Esta diferencia parte de que el calendario usado en occidente era el calendario Juliano, nombrado así en honor de Julio César ya que fue impuesto bajo su consulado. Este calendario suponía que el año estaba constituido por 365,25 días, cuando en realidad la cifra correcta sería 365,242189 días. La diferencia parece pequeña, pero suficiente para que con el paso de los siglos en 1582 el error acumulado era de aproximadamente 10 días, celebrándose ese año la llegada de la primavera el 11 de marzo (cuando originalmente era el 21 de Marzo).
Por dichos motivos en 1582 el Papa Gregorio XIII impulsó la reforma del calendario que llevaría su nombre (el Calendario Gregoriano) y que es el que usamos actualmente. El calendario se adoptó inmediatamente en los países católicos, pero los países ortodoxos o protestantes no estaban por la labor de ponerse a las órdenes del Papa.
Poco a poco el resto del mundo fue aceptando el Calendario Gregoriano como un estándar internacional (incluso aunque internamente usen un calendario distinto). Así en Inglaterra, patria natal de Isaac Newton, el cambio al calendario gregoriano se produjo en 1752. Otros países, especialmente los ortodoxos, fueron más renuentes en aceptar el cambio. En concreto Rusia cambió al Calendario Gregoriano en 1918, después de la revolución bolchevique y Grecia hizo el cambio en 1923, después del final de su guerra con Turquía.
Este cambio de fechas también afecta a una coincidencia que los partidarios de la reencarnación suelen citar, el año de la muerte de Galileo Galilei (1642) coincidía con el año de nacimiento de Isaac Newton (1642 en la fecha Juliana, pero 1643 en la Gregoriana). En realidad transcurre casi un año desde la muerte de Galileo (8 de enero de 1642) y el nacimiento de Newton (4 de enero de 1643 por el calendario gregoriano).
A mi hija pequeña, papá Ne le regalo un set de peluquería. Como pile al Newton ese con la melena, lo deja calvo en dos minutos.
Quise decir Papá Noel, y «pille», pero estoy con el ordenador de Cj y ODIO su teclado.
Pues ya son dos Ju…a Laura también le regalaron un set de esos y fliparía con la melenaza del Newton…
Entonces… ¿qué se dice? Feliz Newton! Isaac para todos!??
Vale, pongo un retrato de Isaac Newton y lo único que se os ocurre es comentar su melena. Ante eso solo puedo decir…
Si no recuerdo mal, el Papa actual ya ha dicho varias veces que celebramos la Navidad el 25 de Diciembre pero que no hay pruebas históricas de que ese día (sea el calendario que sea) naciera Jesús.
Supongo que, igual que uno celebra su cumple el fin de semana anterior/posterior porque en jueves es difícil montar una celebración, es razonable que los cristianos celebren el nacimiento de Jesús en una fecha adecuada (cuando se pudieran reunir sin riesgo de ser fast-food para leones, por ejemplo) y/o con las connotaciones que se le quiera dar a un nacimiento.
De hecho, los españoles celebramos la Constitución el 6 de diciembre, que no es la fecha en la que entró en vigor (el equivalente a un nacimiento) y que ya ha tenido dos reformas.